28 de abril 2023
Con tres parques eólicos en operación:
wpd impulsa la transición energética desde el sur de Chile
Mucho antes del boom de las energías renovables en Chile y que en nuestro país se popularizara el concepto de cambio climático, en 1996 se fundaba el grupo wpd en Alemania, posicionándose como una de las empresas pioneras en liderar la transición energética a nivel global mediante la generación de energía eólica.
A nivel internacional, la compañía cuenta con 27 años de experiencia en desarrollo, construcción y operación de proyectos eólicos. Está presente en 29 países, donde ha instalado 2.630 aerogeneradores, lo que representa una capacidad instalada de 6.110 MW a nivel mundial.
En 2009, wpd inició operaciones en Chile y en 2015 se convirtió en una de las empresas ganadoras de la mayor licitación eléctrica de la historia de nuestro país, adjudicándose contratos de suministro para clientes regulados por 20 años.
Compromiso de largo plazo con la transición energética de Chile
En la actualidad, wpd posee tres parques eólicos operando en Chile: Parque Eólico Lomas de Duqueco (58.8 MW) y Parque Eólico Negrete (36 MW), ambos en la Región del Biobío; mientras que el Parque Eólico Malleco (273 MW) se encuentra en la Región de la Araucanía.
En total, la firma ha invertido cerca de US$750 millones en la construcción de sus tres activos, los cuales generan energía limpia suficiente para iluminar al equivalente de 600.000 hogares y evitan la emisión de 324.000 toneladas de CO2 aproximadamente al año.
“En wpd nos enorgullece aportar a la descarbonización de la matriz energética de Chile y nos llena de satisfacción que nuestro Parque Eólico Malleco sea en la actualidad el proyecto eólico de mayor capacidad instalada del país”, explica Lutz Kindermann, gerente general de wpd Chile.
De acuerdo con el ejecutivo, Chile sigue siendo un país atractivo para invertir en proyectos de ERNC, sin embargo, se requieren medidas urgentes y de corto plazo de parte del Gobierno para corregir situaciones que afectan la sostenibilidad de estos proyectos.
Algunas de esas medidas, destaca, son la necesidad de dar un uso más eficiente a las actuales líneas de transmisión y crear incentivos que permitan migrar hacia un mercado eléctrico basado en fuentes renovables. “En la normativa actual, el mercado eléctrico se sostiene en fuentes fósiles e hídricas. Si Chile quiere avanzar hacia una descarbonización real, es necesario cambiar ese modelo por uno que valorice y priorice las fuentes de generación renovables”, indica.
Desarrollo energético para todo Chile
El compromiso de wpd Chile va más allá de apoyar la descarbonización energética del país, ya que también ha sido pionera en integrar en su estrategia de crecimiento a zonas que han quedado marginadas del avance de las ERNC, como es el caso de la Región de La Araucanía.
“Fuimos la primera generadora en construir un proyecto eólico de gran envergadura en La Araucanía, donde se encuentra nuestro Parque Eólico Malleco, y con ello marcamos un precedente: estamos presentes en un sector que otros actores de la industria evitan. ¿Por qué? Porque queremos ser parte de la solución y aportar al desarrollo energético de una de las regiones más vulnerables de Chile. Y esto solo se logra con presencia, inversión, trabajo colaborativo con comunidades y autoridades, y visión de largo plazo”, afirma Kindermann.
Otra característica del Parque Eólico Malleco es que ha permitido potenciar la producción agrícola del predio en que se emplaza, generando valor compartido y, desde el punto de vista de desarrollo social, ha impulsado iniciativas de inversión que han beneficiado a las comunidades del área de influencia del proyecto.
El ejemplo anterior responde a la visión de wpd Chile, que apunta a que el desarrollo de las ERNC debiese dar oportunidades para que todas las regiones de Chile aprovechen su potencial energético, lo que a su vez beneficia el desarrollo económico y social de estos territorios, gracias a la cadena de valor que se produce en torno a ella.
“En todo el ciclo de vida de un parque de ERNC se requiere contratar mano de obra, productos y servicios. En este sentido, el desafío que tenemos como industria es trabajar junto con la autoridad, las comunidades, la academia y las organizaciones sociales para que esa demanda sea cubierta a en mayor medida a nivel local”, sostiene.
Pero para que la industria sea sostenible y siga expandiendo sus beneficios —dice—, es necesario que la autoridad entregue señales y acciones claras para que el mercado eléctrico incentive responsablemente la inversión en este tipo de tecnologías.